Quique Villalobos se ha convertido en ‘trending topic’. Fuente de inspiración para el grupo indie ‘Anicet Lavodrama’, hace semanas el video musical de la canción ‘El último mate de Quique Villalobos’, protagonizado por el propio alero madrileño, dio vueltas durante días por las páginas web especializadas en baloncesto. Ahora, la figura del ex jugador del Real Madrid, uno de los mayores saltadores que se recuerdan en el baloncesto español, vuelve a cobrar notoriedad con el homenaje recibido por parte de Guillermo Ruiz, escolta del equipo blanco cadete y al que unen vínculos familiares con Villalobos, a quien le dedicó uno de los mates con los que ganó el concurso celebrado en el XIX Torneo Cadete Ciudad de Terrassa.
El concurso de mates celebrado en el pabellón de la Sagrada Familia de la localidad catalana de Terrassa se convirtió en un duelo entre saltadores madrileños. Por un lado, el explosivo Sebastián Krüger del Asefa Estudiantes, y por otro Guillermo Ruiz, escolta del MMT Real Madrid, que decidió homenajear a Quique Villalobos luciendo una camiseta con su nombre en el primer mate de un variado repertorio que terminó por coronarle como ganador del concurso.
Ruiz es sobrino segundo de Villalobos. Aunque no les unen lazos de consanguinidad, a Guillermo el baloncesto también le corre por las venas, pues es hijo de Fernando Ruiz Paz, primo de la mujer de Quique Villalobos, cuyo hermano, Quique, fue base del Real Madrid en la temporada 1986-87. “Lo que sucede es que además tenemos mucha relación porque vivimos en el mismo edificio, tengo un hijo de la misma edad que él y han jugado juntos toda la vida en el jardín”, cuenta el ex jugador del Real Madrid.
Villalobos supo que su sobrino se traía algo entre manos cuando recibió una llamada solicitándole una camiseta de su época como jugador en activo en las filas del Real Madrid. “Me pilló de viaje; llamó Fernando, su padre, para saber si guardaba alguna. Como vivimos en el mismo edificio, le pedí que subiera y que se la pidiera a mi mujer, que es quien se la entregó”, explica el saltarín alero. “Con Guillermo me une el hecho de que mi hijo y él hayan pasado gran parte de su infancia juntos. Ya le había visto jugar con su equipo y antes de eso le había visto jugar con el colegio Estudio. Le he visto crecer junto a mi hijo. Además, en el jardín de la urbanización tenemos una canasta y ya había podido comprobar que tiene unos buenos muelles. Fue un detalle muy bonito que me dedicara uno de sus mates”. Sobre el ‘revival Villalobos’ de las últimas semanas (homenajes, canciones, videoclips…), Quique se lo toma a risa: “qué va, qué va, no estoy de moda, no he vuelto, es sólo una coincidencia”.
Por otro lado, Guillermo nos cuenta cómo surgió la idea: “Mi entrenador, José Luis Pichel, me informó de mi participación en el concurso de mates del torneo en Terrassa. Lo primero que pensé fue en hacer uno de los mates de Quique, pero José Luis me dio la idea de ponerme una camiseta suya para homenajearle a él y a los mates que hacía. Conseguimos una del Real Madrid, me la puse e hice el mate. Luego además gané el concurso”. Ante la pregunta de si se había inspirado en los vuelos de Villalobos para el concurso, Guillermo lo niega: “por mi edad no pude verle jugar en activo, y la verdad es que no he visto ninguna grabación suya jugando. Eso sí, le he visto jugar en la canasta que tenemos abajo en casa y es muy bueno”.
Habrá que seguir los pasos de Guillermo para saber si logra volar como lo hizo su tío en la ACB a finales de los 80 y principios de los 90. Desde luego, promete.
Pincha aquí para ver un video con los mates de Guillermo en el concurso