Este lunes se celebró en Madrid la Asamblea General Ordinaria de la Asociación de Jugadores de Baloncesto del Real Madrid, la cita anual que sirve para que la Junta Directiva presente a las Leyendas Blancas el informe anual oficial sobre la entidad y sus actuaciones. Pero, además, en fechas tan especiales, la asamblea constituye una oportunidad perfecta para que en la cena posterior al acto oficial compañeros de equipo y de club de todas las generaciones, muchos de ellos unidos por lazos de amistad que se remontan varias décadas, vuelvan a reunirse para charlar sobre temas de actualidad o rememorar historias y anécdotas vinculadas a su periplo como jugadores de la sección de baloncesto del Real Madrid.
Al igual que cada mes de diciembre, la asamblea dio comienzo con la lectura por parte del presidente, Rafael Rullán, de un completo informe sobre la gestión del ejercicio que llega a término. Con la presencia y apoyo de los miembros de su Junta Directiva: José Antonio Muñoz, José Manuel Beirán, Fernando Romay, Vicente Ramos, Vicente Paniagua, Luis María Prada, Paco Capel y Darío Quesada, la presentación concluyó con la aprobación unánime de los asociados presentes y un turno de ruegos y preguntas.
También se procedió a anunciar el fichaje más reciente de la asociación: Rudy Fernández. El alero mallorquín se une a Reyes, Sergio Llull, Dani Díez y Sergio Rodríguez como los cinco jugadores que aún no han colgado las botas de la asociación. De este modo, los procedimientos oficiales dieron paso a una versión mucho más distendida de la velada, que en su parte más lúdica y humana reunió alrededor de la mesa a 60 jugadores, – algunos en activo como Felipe Reyes– de la sección de baloncesto del Real Madrid como Juan Antonio Corbalán, Emiliano Rodríguez, Carmelo Cabrera, Clifford Luyk, Antonio Martín, Alfonso Reyes, Alberto Angulo, Lucio Angulo, Roberto Núñez, Santi Abad, Pedro Rodríguez, Carlos Sevillano.
Una vez más, las distintas mesas en la que los jugadores se reunieron se animaron a medida que avanzaba la velada gracias al intercambio de impresiones sobre temas de actualidad o el repaso de grandes historias con un magnífico pasado plagado de títulos como telón de fondo. Pero, ante todo, la asamblea fue una bonita reunión entre amigos y compañeros, uno de los motivos esenciales por los que se fundó la Asociación de Jugadores de Baloncesto del Real Madrid hace 23 años