La victoria de las Leyendas Blancas en Novelda (68-86) este sábado ante el combinado formado por ex jugadores locales, miembros de los Clubes Deportivos Jorge Juan y Elda y los maestros del colegio público Alfonso X el Sabio fue presenciada por cerca de 800 personas, que abarrotaron el pabellón municipal de la localidad alicantina en un evento cuya recaudación será destinada por el centro educativo para un viaje a Inglaterra.
El encuentro dio comienzo con un bonito detalle: el homenaje local a la ex jugadora internacional Alicia López, natural de Elda, quien efectuó el lanzamiento de honor en el salto inicial. Con el balón ya en juego los veteranos blancos dominaron el partido desde el comienzo con grandes porcentajes desde el perímetro. Joe Arlauckas hacía recordar sus grandes actuaciones con la camiseta del primer equipo anotando desde casi cualquier posición en el campo, y un histórico como Vicente Paniagua, quien colgó las botas allá por la de la década de los 70, mostraba que la edad no es rival frente a la calidad, metiendo dos lanzamientos a media distancia en menos de cinco minutos para deleite del público.
A pesar del acierto de los madrileños, el combinado noveldense no bajaba los brazos y gracias a la profundidad de su banquillo se encargaba de que el ritmo del choque no decayera a lo largo de los cuatro cuartos dándole velocidad al juego pese a ver cómo la renta visitante no hacía sino ampliarse. Y es que dos de los jugadores más jóvenes del Real Madrid, Lucas Victoriano y Carlos Martínez detenían cualquier atisbo de remontada local con defensa y contraataques manteniendo siempre la brecha entre ambos equipos mientras dos medallistas olímpicos de la talla de José Luis Llorente y José Manuel Beirán hacían las delicias de los más nostálgicos dejando muestras del talento que puso a la Selección Española en el mapa del baloncesto mundial en 1984.
Al final, 68-86 en una fiesta que comenzó en las horas previas a partido con una visita de los miembros de la Asociación de Jugadores de Baloncesto del Real Madrid a los alumnos del colegio Alfonso X el Sabio, a quienes firmaron incontables autógrafos y con los que jugaron al baloncesto antes de vestirse de corto.
Por último, hay que destacar la implicación de las empresas y entidades colaboradoras, cruciales para que la celebración del evento fuese un éxito organizativo y un impulso para la práctica del baloncesto en la región.